Como ha sido siempre tradicional y a pesar de los inconvenientes de Covid-19, Cantoría Hipponensis ha realizado este tradicional concierto en el marco singular de la Parroquia de San Agustín de Valencia, el día 20 tan íntimamente unido al nombre de nuestro Coro.

Y al iniciar esta crónica me ha venido a la mente el pensamiento que leí no se donde que decía: “El éxito es la suma de pequeños esfuerzos repetidos dia tras día”.  Aunque hemos de matizar este pensamiento, pues el esfuerzo ha sido  no pequeño, ya que ensayar con mascarilla y cantar con mascarilla no resulta nada agradable e incluso, a veces, es bastante insoportable. Y aquí si que tiene razón el proverbio etíope que declara “que cuando las arañas tejen juntas, pueden atar un león”.

El programa del Concierto estaba compuesto por 12 villancicos, con títulos de las diversas regiones españolas y villancicos sudamericanos, a los que Cantoría Hipponensis añadió los dos bises más conocidos a nivel internacional como son el Noche de Dios y Adeste fideles.

Y aquí si que valoro el pensamiento de Ryunosuke Saton al afirmar que “individualmente, somos una gota. Juntos, somos un océano”, pues el público asistente, cumpliendo las normativas del momento, contribuyó con su calido aplauso a que el Concierto en su totalidad resultase un preludio tierno de la Navidad que ya está tán cercana.

Independiente de la labor de sobresaliente de nuestra directora, Doña Inmaculada Burriel, queremos resaltar la colaboración del percusionista Gonzalo Alarcón por su virtuosismo y el tiempo dedicado a nuestra labor coral

Espero que los próximos Conciertos Navideños no tengan los obstáculos del presente año 2020.

FELIZ NAVIDAD

Juan José Davalillo